Televisión: Pilotos 2015 (IV)

Por David Sancho

Título: Blood & Oil  

Creada por: Josh Plate y Rodes Fishburne

Emitida en: ABC.

Reparto: Don Johnson, Chace Crawford, Rebecca Rittenhouse, Amber Valletta, Scott Michael Foster, Adan Canto, Delroy Lindo.

Audiencia: 6,31 millones.

Básicamente es Dallas adaptada a los nuevos tiempos. Una pareja que se muda a un pueblo en medio del mayor descubrimiento petrolero de la historia de Estados Unidos. Gente guapa, gente mala, traiciones, amoríos… lo típico en un culebrón. Y como en la mayoría de los culebrones, las actuaciones no son nada del otro mundo, los guiones son rocambolescos y con poco sentido, las acciones de los personajes no son muy coherentes, etc.

A quién le gusten los culebrones podrá disfrutar de la primera temporada, no tendrá más, y a quién no, pues muy fácil, que la evite. Porque Blood & Oil no engaña, es un culebrón de libro y no intenta maquillarlo. Posiblemente ahí radique su fracaso. En los tiempos que corren, con los cambios que ha habido en el panorama televisivo, volver a un formato de este tipo es muy arriesgado, por no decir suicida, sobre todo si lo ubicamos en el prime time.

Lo mejor: Poder ver a Don Johnson de nuevo en televisión.

Lo peor: Tener que verle haciendo esto.

Puntuación: 2

Título: Quantico.    

Creada por: Joshua Safran

Emitida en: ABC.

Reparto: Priyanca Chopra, Josh Hopkins, Jake McLaughlin, Aunjanue Ellis, Yasmine Al Massri, Johanna Brady, Tate Ellington, Graham Rogers, Anabelle Acosta.

Audiencia: 6,99 millones.

Estamos ante el piloto del año, la serie estrenada en las network más interesante, y aun así no es nada del otro mundo. Lo cierto es que la fórmula es interesante. Quantico mezcla Anatomía de Grey con Homeland. La serie nos muestra dos líneas temporales. La primera nos cuenta como un grupo de jóvenes, todos ellos guapos y guapas, ingresan en la academia FBI. Allí se dan amoríos, mal entendidos, traiciones y demás, a la vez que se preparan para ser agentes de campo. Por otro lado tenemos otra línea temporal en la que ha habido un atentado y los guapetes que han conseguido ingresar en el FBI tienen que averiguar quién ha sido el responsable.

La serie combina con mucha inteligencia la superficialidad con la intriga, cosa que ya hacía su creador cuando era guionista de Gossip Girl, aunque aquí equilibra un poco más la balanza entre las dos vertientes. Pero al igual que en Gossip Girl la escritura deja mucho que desear. Los diálogos son vergonzosos en muchos momentos y los enredos amorosos por ahora están medianamente controlados, pero están a un paso de caer en el absurdo.

Que la serie tenga vida a largo plazo dependerá de la calidad de sus intrigas, aún es pronto para saber si es todo un gran chiste o si hay algo que rascar, y de la capacidad de los guionistas y el reparto para conseguir que sus personajes y relaciones sean atractivos para el público. Yo, por ahora, me quedo.

Lo mejor: Que entretiene y mucho.

Lo peor: No se trata de una buena serie, es un mero entretenimiento.

Puntuación: 7.

Título: Grandfathered    

Creada por: Daniel Chun.

Emitida en: FOX.

Reparto: John Stamos, Josh Peck, Paget Brewster, Christina Milian, Ravi Patel, Kelly Jenrette.

Audiencia: 5,34 millones.

Un playboy de mediana edad descubre de la noche a la mañana que tiene un hijo y que a su vez, ese hijo tiene una hija, lo que le convierte en abuelo. Obviamente esto interfiere en su estilo de vida de eterno adolescente que solamente piensa en salir con mujeres y pasarlo bien. Dicho descubrimiento le obligará a replantearse sus prioridades.

Premisa no muy original y desarrollo aún más rutinario. Muchas similitudes con el personaje que interpretaba John Stamos en Padres forzosos. Tal vez ese sea el motivo por el que fue elegido para interpretarlo. Lo que aún no entiendo es por qué eligieron a Josh Peck como su hijo. ¿Soy el único al que le resulta mal actor y hasta agobiante? Lo suyo en Jersey Boys es de las peores actuaciones que he visto en años.

Pero una comedia puede sobrevivir a una mala premisa si luego los chistes y situaciones que nos plantea funcionan, aunque no es el caso. Los chistes son facilones y el desarrollo de las serie nos lleva por unos derroteros mil veces vistos. Igual consigue la segunda temporada por el bajo nivel que tienen las comedias de FOX, pero por nada más.

Lo mejor: John Stamos.

Lo peor: Josh Peck y la ausencia de risas.

Puntuación: 3.